Este bien podría haber sido el titular del siguiente artículo que os ofrecemos a continuación. Idea interesante la que ha puesto en marcha el Ayuntamiento de la villa. El Ayuntamiento de Binéfar dará la posibilidad a los vecinos de la localidad de adquirir las farolas del alumbrado público que se retiran de las calles debido al plan de renovación de la iluminación en el casco urbano.
Para ello, se ha abierto un plazo comprendido entre el 1 y el 30 del próximo mes de junio para que aquellos que estén interesados puedan presentar por escrito sus solicitudes en las oficinas municipales.
Las condiciones establecen que las farolas se podrán instalar en edificios situados fuera del casco urbano y con licencia municipal, hasta un máximo de tres por cada propiedad o finca particular. En concreto, los vecinos que poseen explotaciones agrícolas o ganaderas y casas de campo son los que han mostrado un mayor interés por adquirirlas.
El consistorio ha fijado los precios simbólicos de las farolas entre los dos y los cuarenta euros para los vecinos de la localidad. Las unidades son limitadas y, por eso, según destaca la nota emitida por el ayuntamiento esta semana, se adjudicarán por riguroso orden de petición.
En una situación similar, el destino natural de las farolas hubiese sido la chatarra, pero en este caso la corporación municipal ha entendido, con buen criterio, que pueden tener una reutilización.
La razón de que el ayuntamiento retire las farolas es el plan de renovación de la iluminación pública que se está acometiendo actualmente en el casco urbano de la capital literana.
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